Mira Schönegge Ilustradora de Berlín, Alemania

Mira Schönegge le encanta las palabras, los colores y el sonido. Su expresión creativa abarca diversos materiales, la narración de historias y la música. La escritura libre y la puesta en escena de historias han sido sus grandes pasiones desde pequeña.
Como ilustradora, combina lo analógico y lo digital, y busca buenas formas de representación en torno a temas como el feminismo, la justicia social y el amor más allá de los ideales sociales. Desde hace muchos años también imparte talleres sobre estos temas como formadora en sensibilidad ante la discriminación. Estudió Pedagogía del Arte y Lingüística en Frankfurt a.M. y le encanta trabajar en el ámbito educativo, acompañando clases de yoga para niños y cursos de cerámica infantil.
Mira habla varios idiomas con fluidez y cree firmemente que todas las lenguas del mundo son en realidad hechizos gratuitos con un gran poder curativo. En 2017 viajó durante dos años como madre soltera con su bebé y una mochila por Europa, Marruecos y Nicaragua. Posteriormente, recorrió la costa atlántica desde Suecia hasta España en una pequeña furgoneta roja, su “caracol sobre ruedas”. Su primer libro ilustrado, publicado en 2024, contiene muchas piezas de rompecabezas de esos viajes.
Ahora, tiene su escritorio delante de un gran ventanal en lo alto, desde donde se puede ver mucho cielo y un pequeño rincón de Berlín.
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¿Qué te ha traído al mundo del arte?
Esta pregunta realmente nunca me la había planteado. Creo que simplemente me sienta bien relacionarme creativamente con el mundo y espero poder seguir haciéndolo siempre. En mi infancia, recuerdo mucho papel y lápices de colores mientras viajaba con mi imaginación escuchando audiolibros. Más tarde, en el colegio, participé en proyectos de teatro y musicales. Con amigas inventábamos historias y grabábamos nuestras propias películas y audiolibros. Escribir canciones, aprender instrumentos y nuevos idiomas siempre me ha inspirado. Desde la perspectiva actual, puedo ver un hilo conductor en mi trabajo creativo a través de distintas formas de “contar historias”. Además, llevo muchos años leyendo cuentos ilustrados por las noches :) y eso me llevó de vuelta a los lápices de colores para comenzar a trabajar en mi primera idea de un libro ilustrado.

¿Cómo llegaste a formar parte del programa de Cornelia 'Artist in Residence'?
Conocí a Cornelia cuando una amiga mía rodaba con ella una entrevista para ARTE. Me acerqué a hablarle y, como ya había trabajado antes para la empresa de televisión involucrada, ayudé con el montaje y desmontaje. Fue algo bastante gracioso porque llevaba un conejo disecado que formaba parte de la decoración del set de la entrevista (nadie sabe por qué estaba ahí :). Justo había firmado el contrato para publicar mi primer libro ilustrado y se lo conté a Cornelia, quien entonces me invitó a Fraggina.

¿Cómo fue tu estancia en la finca de Cornelia en Volterra? ¿Encontraste inspiración allí?
Fraggina es un lugar maravilloso y visitar a Cornelia allí fue para mí un gran honor. Las vistas del precioso paisaje con los cipreses y olivares alrededor, y la pequeña cocina comunitaria crean un ambiente acogedor donde es fácil soñar, trabajar y conversar con otros artistas.

¿Qué te llevaste a casa desde allí?
Muchos pensamientos y encuentros muy bonitos. Fueron especialmente valiosas para mí las conversaciones con Cornelia, de las que probablemente me llevo más de lo que pueda comprender ahora mismo ;) También me llevé algunos tesoros encontrados en la naturaleza y recuerdos mágicos de un paseo por Volterra, con vistas a los pequeños y enrevesados tejados de tejas bajo el sol del atardecer.