Alonja Rhie

Desde pequeña empecé a contar historias y, por ejemplo, escribía pequeños textos acompañados con dibujos. Probablemente comencé a escribir relatos más extensos porque siempre me ha gustado mucho leer.

Mi profesora de inglés me sugirió participar en este premio. Cuando investigué más sobre él, decidí enviar mi historia titulada: Martha.

El primer día me sentí un poco abrumada por la falta de un programa estructurado con actividades obligatorias, pero con el tiempo esa sensación se transformó en una gran libertad creativa. El impresionante paisaje me inspiró a escribir poemas y a continuar con un proyecto más extenso. Además, la tranquilidad y las conversaciones profundas con otros invitados me llevaron a experimentar con nuevas formas de arte, como el grabado en madera, la escritura de guiones y la dirección.

Además de objetos materiales, como el grabado en madera y una serie de fotos de las flores del lugar, me llevé muchas ideas nuevas e inspiración. Por ejemplo, gracias a las profundas conversaciones, se me ocurrió la idea de un proyecto internacional.