Evgenia Malina Ilustradora de Woking, Inglaterra

En un principio pensé en ser restauradora o caricaturista, pero luego comenzó lo de la impresión digital, así que inicié mi carrera como diseñadora gráfica. Fue una gran experiencia. Aprendí mucho y conocí gente maravillosa. Pero no era exactamente lo que quería. Me gusta dibujar personajes y emociones, y observar a las personas y los animales, ver cómo se mueven y cómo interactúan entre sí. Hoy en día, los ilustradores pueden trabajar para cualquiera, en cualquier parte del mundo, y pueden enviar su trabajo a los clientes con solo un clic, lo cual es fantástico. Así que decidí pasarme a la ilustración. Y aquí estoy ahora, creando mundos en mi pequeño estudio con vistas al jardín.

Tengo el privilegio de trabajar desde casa, así que empiezo mi jornada laboral tarde, después de una agradable y cómoda rutina que me ayuda a tener el estado de ánimo adecuado. Normalmente hago un plan el día anterior. Sorprendentemente, la mayor parte de mi trabajo no implica dibujar. El marketing, la investigación y la promoción en las redes sociales ocupan la mitad del tiempo. Comparto el estudio con mi pareja. Afortunadamente, él no es artista y, por lo tanto, no necesita tanto espacio como yo con todos mis materiales de trabajo :) Hacia el mediodía, a menudo salimos a caminar al parque cercano. Normalmente trabajo hasta las 8:00 de la noche para tener tiempo de cenar, ver una película o leer un libro. Antes del período del Corona, a menudo iba a dibujar. Parece que ha pasado una eternidad desde entonces ...

Todos los ilustradores que admiro me influyen. Me encantan las ilustraciones que parecen espontáneas y un poco "infantiles". Aprendo del trabajo de Beatrice Alemagna, Quentin Blake, May Miturich, Isabelle Arsenault, Anita Jeram, Tove Jansson y muchos otros. Colecciono ilustraciones en Pinterest y observo más de cerca las que más me gustan.

No sé si puedes llamarlo inspiración. Cada nuevo proyecto comienza con una investigación: imágenes, antecedentes históricos de la historia, juego con diferentes técnicas, elijo los colores. Entonces a menudo necesito un descanso para procesar todo esto. Después de eso, generalmente sé cómo comenzar. Pero a veces lo veo frente a mí desde el principio sin saber de dónde viene. De alguna experiencia de mi vida, supongo.

Depende del trabajo en el que estoy trabajando. Estoy escribiendo este y otros textos en silencio, escuchando solo a los pájaros que cantan frente a la ventana. A veces también escucho música de fondo. Hay mucho de eso en YouTube, por ejemplo en el canal de música Chillhop.

Algo alegre, divertido, atemporal, amistoso y sabio.

Todas ellas son mis hijas y las quiero a todas. Por otro lado, aprendo con cada encargo, con cada proyecto, y voy mejorando. Y cuando vuelvo a mirar algunos de mis dibujos, veo lo que podría haber hecho mejor. Me gusta la pandilla de zorros que diseñé para el calendario de foxoterapia, pero cuando los miro hoy, me gustaría mejorar algunas cosas, y probablemente lo haré.

Nunca lo pensé hasta que comencé a ilustrar. Ilustrar es como hacer una película, solo que eres todo el equipo de una sola persona. Te encargas del casting, del vestuario, del equipo, de la perspectiva de la cámara, del estilo, del color... Cada proyecto es un viaje diferente, emocionante y fascinante. Siempre hay algo nuevo que descubrir y cosas nuevas que aprender.

La imaginación, la curiosidad y la práctica.

Sí, existe. A veces es solo fatiga. Dormir, una buena comida y una caminata generalmente ayudan. Si no es así, sigo desperdiciando papel hasta que en algún momento aparece la imagen que estoy buscando.